En el Pleno de alegaciones al Presupuesto 2016, los socialistas hemos mantenido la actitud coherente y de sentido común que hemos defendido desde que comenzaran a desarrollarse estas cuentas. Nuestro grupo municipal votó en contra del presupuesto porque el equipo de gobierno se negó a incluir nuestras peticiones, que se centraban en aumentar la inversión en empleo, vivienda y protección social; porque seguía habiendo falta de transparencia, con muchas partidas genéricas que impiden saber dónde irán esos fondos; y porque el capítulo de ingresos incluye partidas ficticias como los 8 millones de la Junta de Andalucía que no se corresponden con ninguna subvención, tal y como reconoció la intervención del Ayuntamiento.
Aunque votamos en contra por responsabilidad, pues no íbamos a ser cómplices de estas cuentas, no presentamos alegaciones para que el Presupuesto se retrasara lo menos posible, pues somos conscientes de que la ciudad necesita unas cuentas para este ejercicio y que la situación de tenerlas prorrogadas desde 2014 es insostenible.
Otros grupos de la oposición, así como el sindicato CCOO, sí presentaron alegaciones, dos de ellas recogían lo mismo que nosotros estábamos denunciando en los últimos meses: que no se puede incluir en el presupuesto los ingresos de los bajos de la tribuna del Estadio, puesto que no saben si se venderá; y que los 8 millones de ingresos de la Junta de Andalucía son ficticios. Fue el partido socialista quien planteó en primer lugar estas cuestiones, por lo que, por coherencia, votamos a favor de dichas alegaciones.
Desde el equipo de gobierno han querido atacarnos diciendo que, debido a nuestro voto, la ciudad quedaba paralizada, algo que, como se ha demostrado, es totalmente falso. El lunes siguiente a este Pleno, se aprobó el presupuesto en la Junta de Gobierno Local, de forma unilateral y bajo su responsabilidad. No vamos a ser cómplices de unas cuentas que no responden a las prioridades de la ciudad, que incumple los compromisos electorales del partido en el gobierno y que se basa en ingresos ficticios.